Un Data Center o Centro de Procesamiento de Datos (CPD), del que ya hablamos en un post anterior sobre hosting y servidores virtuales, consiste en una infraestructura de servidores conectados entre sí donde se almacena y se procesa gran cantidad de información. En la actual Sociedad de la Información, donde Internet se ha convertido en herramienta diaria en nuestra vida, Google se erige por derecho propio en el rey de reyes de Internet, siendo su misión, como ellos mismos dicen, la de ordenar toda la información del mundo. En este sentido, los data center de Google se convierten en un elemento de extrema importancia, al albergar en sus índices los rankings por los que tantos negocios y especialistas se pelean diariamente.
En los últimos tiempos, tras las actualizaciones del gigante de Mountain View, la geolocalización está ganando mucho peso como factor fundamental en el posicionamiento orgánico del buscador. Y es ese aspecto el que hace volver la mirada hacia los data center y preguntarse cuál es realmente la manera en que se organiza la información en estos grandes centros de datos y cuál es el impacto real en el posicionamiento de un contenido y una página web concreta. Todo esto ha suscitado debate y ha generado un mito alrededor de los data center y su influencia en el posicionamiento geolocalizado.
Dentro de la multitud de factores de posicionamiento en buscadores, es principalmente en el aspecto de la localización del servidor donde se producen mayores confusiones en cuanto a posicionamiento SEO local. Es cierto que la ubicación territorial de un servidor donde tengamos alojado nuestro dominio será un factor que influirá en el posicionamiento territorial de la web. Sin embargo, aunque este factor tiene importancia, en palabras de uno de los ingenieros de Google, John Muller, la velocidad de carga y los ccTLD o gTLD son mucho más decisivos que la IP del servidor, que en muchos casos puede llegar a tener un impacto irrelevante.
Son de sobra conocidos los factores que maneja Google a la hora de decidir el posicionamiento orgánico por geolocalización de un determinado contenido online. De hecho, en este post para webmasters se puede encontrar un pequeño resumen de las “señales” que indican a Google que un contenido está etiquetado y segmentado para un determinado público y región. Básicamente, Google se fija en los siguientes puntos:
– Uso de un dominio local
– Especificación manual de ubicación a través de Google Webmaster Tools
– El idioma del contenido
– Estructuras de URL:
- ccTLD: dominio.es
- Subdominio de un gTLD: es.dominio.com
- Subdirectorio con gTLD: dominio.com/es
- Parámetros de URL: dominio.com/?loc=es
– Etiqueta html hreflang
– Localización del servidor
– Direcciones y teléfonos locales<
– Backlinks desde otros sitios locales
– Presencia en Google Local Business
Desde Nominalia hemos puesto en marcha recientemente un centro de datos en Reino Unido y queríamos dejar claro que el hecho de que los servidores no estén en España, no influye negativamente en el posicionamiento, aunque esa falsa creencia siga arraigada en la mente de muchos usuarios que creen que su posicionamiento online geolocalizado pueda verse perjudicado. Atender a los diversos factores que maneja Google, crear contenido segmentado y contar con una estructura de backlinks locales pueden llevar a un dominio a aparecer en posiciones privilegiadas en búsquedas muy localizadas, aunque el servidor se encuentre en otra parte.