Siempre que iniciamos un proyecto web, la elección del hosting o alojamiento web se convierte en uno de los aspectos clave fundamentales para garantizar el correcto funcionamiento y rendimiento de nuestro sitio. En este punto, al considerar el hosting que contrataremos, debemos tener en cuenta una serie de características. Y también una serie de funcionalidades que ofrecen los servidores de los proveedores de hosting. Así, podremos quedarnos con aquél que cubra de manera más óptima nuestras necesidades.
Uno de los errores habituales es no acertar con el servidor más adecuado a las exigencias del sitio web. En este sentido, hay que valorar dos aspectos fundamentales. Uno, el sistema operativo que emplea el servidor. Y dos, el tipo de web que vamos a construir.
Servidores Linux vs Windows
Linux destaca como sistema operativo y plataforma para servidor, ya que es considerado el sistema más fiable, seguro, potente y rápido, y por ello, suele ser la opción más extendida debido a su mayor rendimiento y estabilidad. Salvo que en nuestro proyecto web en concreto vayamos a utilizar herramientas propias de Microsoft, lo normal es decantarse por servidores que utilicen Linux.
Digamos que si la intención es trabajar con aplicaciones web que utilicen lenguajes como PHP y utilizar bases de datos MySQL (WordPress, Joomla…), la opción más natural es Linux.
El motivo por el que se eligen servidores Windows es que se vaya a trabajar con aplicaciones basadas en tecnología de Microsoft como ASP.NET y bases de datos SQL Server, tecnologías que un servidor Linux directamente no puede ejecutar.
Webs “estáticas” frente a webs “dinámicas”
Se considera web “estática” aquella que sólo está constituida por páginas HTML simples cuyo contenido sea fijo, es decir, ficheros con extensión .html. En cambio, se consideran webs “dinámicas” aquellas creadas con un lenguaje de programación PHP o similar, cuyo contenido varía constantemente. Este último tipo de webs suelen usar bases de datos para almacenar la información dinámica, lo que sumado a la ejecución de PHP, las convierte en webs mucho más exigentes para el servidor. En este sentido, debemos tener cuidado para no contratar un servidor demasiado potente y caro para una web simple, y lo que es más importante, asegurarse de no contratar un servidor demasiado barato o infradimensionado para una web más compleja y exigente. Lo ideal es contratar un servidor acorde a la magnitud del proyecto web.
Existen soluciones adaptadas para cada tipo de cliente y cada tipo de web. En Nominalia hemos lanzado reciente nuestros nuevos Packs de Hosting, segmentándolos de acuerdo al perfil de cliente al que va dirigido cada uno, cubriendo las necesidades específicas de cada proyecto web. Tenemos disponibles 3 paquetes de Hosting: Linux, Distribuidores y Windows.
Características importantes del hosting
Aparte de los puntos que hemos comentado, existen otras propiedades básicas que debe ofrecer todo buen hosting, y que se pueden resumir en un breve listado:
- Capacidad de espacio del servidor.
- Transferencia de datos al mes.
Es la cantidad de datos que un servidor permite transferir debido a cualquier tráfico originado en la web (visitas a la web, transferencias FTP, mensajes recibidos y enviados…). - Velocidad de enlace del servidor.
Un factor muy importante para el posicionamiento en buscadores es la velocidad de carga de la web, que viene determinada en gran medida por la cantidad de elementos que se deben cargar en el sitio, pero un servidor rápido contribuirá a optimizar al máximo este aspecto. - Lenguajes soportados: HTML, Javascript, PHP…
- Bases de datos MySQL.
Capacidad de almacenar datos y actualizaciones de contenido que realicemos en la web. - Subdominios y dominios adicionales.
Número de subdominios disponibles para poder organizar más lógicamente la estructura del sitio web. Los dominios adicionales son útiles para poder contar con más de un dominio sin requerir espacio adicional en disco, compartiendo el espacio en disco entre ellos. Nominalia en este sentido ofrece un producto multi-dominio. - Panel de control.
Herramienta para configurar diversos aspectos del servidor. El más famoso y más utilizado es CPanel. - Acceso FTP.
El protocolo de transferencia de datos más sencillo de utilizar para cargar y descargar archivos del sitio web a través de un cliente FTP (Filezilla, por ejemplo).
Otras características para servidores de hosting
- Uptime superior al 99.9 %.
El Uptime es el porcentaje del tiempo al mes que nuestros servidores están disponibles. En la cara opuesta, encontramos el tiempo de Downtime, que se emplea para actualizar software o hardware en los servidores, prevenir o detener ataques al servidor. - Backup.
De lo más importante: una copia de seguridad para poder recuperar todos los datos de la web si ocurre algún desastre o para volver a un punto anterior. - Soporte técnico 24 horas.
- CMS Autoinstalable o aplicaciones Click & Build.
Gestores de contenido o CMS como WordPress, Joomla o Drupal.
Recuerda siempre analizar las prestaciones del hosting web y procura contratar un alojamiento web acorde a tus necesidades, teniendo en cuenta si vas a trabajar con servidores Linux o servidores Windows.