Antes de comparar la oferta de servidores web de los diversos proveedores, debemos tener claras dos cuestiones: en qué sistema operativo queremos alojar nuestra web —ya sea Linux o Windows— y qué modelos de servidores existen. En la entrada de hoy trataremos brevemente esta última cuestión.
Qué es un servidor web y para qué sirve
Los servidores web son, de manera muy simplificada, programas que se instalan en un ordenador para hacer que esté permanentemente conectado a Internet y pueda responder a las peticiones de los usuarios.
Los usos más habituales son el almacenamiento, procesamiento y entrega de páginas web, así como programas relacionados con la Web y las intranets, como son el funcionamiento de correo electrónico, y la trasferencia de ficheros FTP. Sin embargo, también pueden usarse en impresoras, routers, webcams o redes locales.
Los tipos de servidor web más utilizados
Aunque existe una larga lista de servidores web, el mercado actual está dominado por cuatro «gigantes»: según las cifras del mes de febrero de 2018 manejadas por Netcraft, los modelos de servidor más usados en el mundo son los Apache, nginx, Google y Microsoft.
Servidor Apache
El servidor HTTP Apache es el más antiguo y utilizado hasta la actualidad. Si bien su cuota de mercado ha ido descendiendo en los últimos años, aún es usado por más del 40 % de las páginas web, el doble que nginx, el segundo servidor más popular.
La Apache Foundation lo desarrolló a mediados de los años 90 y se puede instalar en plataformas Linux, Windows y Mac OSX, entre otras.
La gran ventaja de Apache es que es de código abierto, por lo que se puede personalizar y ampliar por módulos sin afectar la base del servidor. Además, es uno de los más estables, lo que lo hace una opción muy rentable, y la mayor parte de los fallos de seguridad que se han descubierto en el pasado solo podían ser aprovechados por usuarios locales.
Entre las páginas web más conocidas que utilizan un servidor Apache están Adobe, PayPal y Apple.
Servidores nginx
La característica más destacada de nginx (leído como «Engine-X») es que se basa en eventos, a diferencia de Apache —que usa un sistema de hilos— y puede gestionar miles de conexiones simultáneas —algo ideal para los servidores proxy durante situaciones de emergencia— empleando muchos menos recursos que otros modelos. Además, como también es open-source, nos permite añadir módulos fácilmente.
Dropbox, Netflix y WordPress, entre otros muchos, hacen uso de servidores nginx.
Servidor de Google
También conocido como GWS, de Google Web Server, es un servidor a medida que Google usa en sus infraestructuras y que alberga aproximadamente un 10 % de todas las páginas web activas del mundo.
Servidor IIS de Microsoft
El servidor IIS (de Internet Information Services) fue desarrollado por Microsoft y por tanto no es de código abierto, motivo por el cual añadir módulos no resulta nada fácil. Como contrapartida, IIS dispone de varios niveles de autenticación, por lo que es un servidor muy seguro. Incluye FTP, SMTP, NNTP y HTTP/HTTPS.
Cómo elegir el servidor más adecuado para tu proyecto
Como comentábamos más arriba, existen muchos más modelos de servidores web, como LiteSpeed, Tomcat, Node.js o IBM, que, pese a ser minoritarios, tienen su espacio, por lo general entre perfiles especializados.
La gran mayoría de alojamientos comerciales Linux utilizan el servidor Apache, pero las necesidades particulares de cada proyecto y las características de cada cliente son las que deberían marcar cuál es el modelo idóneo.
Si necesitas más información sobre el tipo que más te conviene en tu caso, el equipo especialista en servidores web de Nominalia estará encantado de ayudarte. Podrás encontrar servidores dedicados administrados y también servidores virtuales.